
[Panorámica del área cubierta del Palacio de Néstor en Pilos. (Fæ / CC-BY-SA-3.0)]
David Martín González lavanguardia.com 04/12/2019
La Pilos más antigua, referida en la Odisea, es un botín para la historia. Sus restos aportan nuevas teorías sobre la relación entre minoicos y micénicos
“¡Néstor Nelida, gloria insigne de los aqueos! Preguntas de dónde somos. Pues yo te lo diré. Venimos de Ítaca, situada al pie del Neyo, y el negocio que nos trae no es público, sino particular. Ando en pos de la gran fama de mi padre, por si oyeres hablar del divino y paciente Odiseo. El cual, según afirman, destruyó la ciudad troyana, combatiendo contigo”.
Estas palabras sonaron, si damos crédito a Homero, en el palacio de Néstor, rey de Pilos, después de que Telémaco, hijo de Odiseo, entrase por la puerta buscando a su progenitor con el objetivo de devolverlo a Ítaca para poner fin a los desmanes de los pretendientes de su madre, Penélope. Palabras e historias como esta fueron las que impulsaron durante siglos a los arqueólogos.