El
acto,
organizado
por el
Aula
de
Cultura
de SUR
y la
Sala
Ámbito
Cultural,
será
presentado
por el
escritor
Alfredo
Taján,
a
partir
de las
19,30
horas
en
Ámbito
Cultural,
situado
en el
departamento
de
Librería
de El
Corte
Inglés.
RETO. Luque está ilusionada porque en su conferencia de hoy puede establecer paralelismos con el mundo clásico. / FERNANDO GONZÁLEZ
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Actos |
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La conferencia.
Título: 'El Carnaval. Ecos rituales en el Mediterráneo Antiguo'.
Lugar: Salón de actos Ámbito Cultural de El Corte Inglés.
Fecha y hora: Hoy a las 19,30.
La ponente
Nació: En Almería, pero pasó su infancia en Cádiar (Granada) y se considera malagueña.
Estudios: Licenciada en Filología Clásica, imparte clases de griego en el IES Miraflores de los Ángeles.
Publicaciones: Ha escrito numerosos libros y es articulista de SUR.
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El
Carnaval
de
Málaga
arranca
esta
tarde
con la
conferencia
que
ofrecerá
Aurora
Luque
en el
salón
de
actos
Ámbito
Cultural
de El
Corte
Inglés.
La
poeta,
profesora
de
griego
y
articulista
de SUR
centrará
su
discurso
en las
similitudes
que
existen
entre
el
carnaval
moderno
y el
de la
antigua
Grecia
y
Roma.
«Unos
parecidos
sorprendentes»,
afirma.
¿Cómo
surge
la
iniciativa?
Me lo
propuso
Juan
Antonio
Vigar
(director
del
Aula
de
Cultura
de SUR
y
organizador
de la
charla)
hace
dos
años.
Me
dijo
que
nunca
lo
había
hecho
una
mujer
y que
estaría
muy
bien
porque
le
gustaban
mucho
mis
artículos.
Pero
yo ese
año no
lo
pude
hacer
y el
año
pasado
tampoco
porque
estaba
de
viaje.
Parece
que a
la
tercera
ha
sido
la
vencida.
¿Le
hace
ilusión?
Me
hace
ilusión
sobre
todo
ahora
que he
leído
y me
he
preparado
un
poco.
Ahora
agradezco
que me
hayan
invitado
por la
cantidad
de
cosas
que he
aprendido,
principalmente
de
Málaga.
He
conocido
además
los
precedentes
y me
ha
parecido
muy
interesante.
¿De
qué
hablará
en la
conferencia?
Sobre
todo
de
Grecia
y
Roma,
y de
Oriente
Próximo,
y los
elementos
comunes
que
hay
porque
participamos
de un
mismo
ciclo
vital
y
temporal.
Tenemos
un
clima
y una
agricultura
parecidas.
Los
restos
paganos
tienen
unas
raíces
impresionantes
en
todas
las
fiestas.
Es
increíble
el
parecido
entre
el
carnaval
clásico
y el
actual.
¿Cuáles
son
las
similitudes
más
importantes?
Sobre
todo,
respecto
a
Grecia,
los
ritos
dionisíacos.
Las
fiesta
de
Dionisos,
que
también
se
celebra
en
primavera,
tiene
elementos
comunes
como
la
danza,
la
máscara,
los
disfraces...
Dionisos
aparece
siempre
con
una
máscara
y es
interesante
ver
cómo
los
coros
son
muy
importantes.
La
gente
que
danza
y va
por
las
calles.
Que
canta,
que
bebe.
El
tema
del
mundo
al
revés,
lo que
no se
hace
el
resto
del
año se
hace
entonces.
Las
canciones
obscenas,
se
permiten
críticas
a la
situación
actual....
Son
elementos
que
perviven
ahora.
Fiesta
prohibida
¿Cómo
vivió
el
carnaval
durante
la
infancia?
El
preparar
la
conferencia
me ha
hecho
pensar
sobre
eso y
las
conclusiones
son un
poco
tristes.
Yo
pertenezco
a una
franja
de
edad
en la
que no
se
vivió
el
carnaval
porque
se
prohibió
por
decreto.
Y he
acusado
no
vivirlo
durante
la
infancia
porque
de
esta
etapa
proceden
las
emociones
más
fuertes.
Para
que
una
fiesta
sea
tuya
la
tienes
que
vivir
desde
pequeña
y eso
ha
fallado.
Estaba
prohibido.
Incluso
yo
preguntaba
por
qué a
algunas
personas
salían
disfrazadas
a la
calle.
Lo
único
que se
celebraba
era el
'día
del
pucherico',
que
era
una
fiesta
reservada
para
los
niños,
que
eran
los
únicos
que la
vivían.
¿Qué
es
para
usted
el
carnaval?
Es una
fiesta
muy
ligada
a la
libertad
y a la
paz.
Incluso
esa
relación
ya la
vieron
los
antiguos
ya que
en una
comedia
de
Aristófanes
aparece
representada
la paz
junto
a la
fiesta
y a la
cosecha,
que
son
sus
damas
de
honor.
Es la
libertad
para
hacer
letras
más o
menos
punzantes
y
hablar
de las
cosas
de los
políticos
que no
se
hacen
durante
el
resto
del
año.
¿Cuándo
recuerda
haber
vivido
por
primera
vez el
carnaval
como
tal?
Hasta
que no
llegué
a
Málaga
en el
año 88
no
tengo
recuerdos
de
esta
fiesta.
La
persecución
del
carnaval
había
acabado
y
recuerdo
haber
paseado
por el
parque,
por el
recinto
Eduardo
Ocón y
ver la
presencia
de
mucha
gente
en la
calle.
¿Se ha
disfrazado
alguna
vez?
No, y
tal
vez
esa es
una de
las
carencias
que
tengo.
Tengo
amigas
que lo
han
hecho
y que
incluso
han
ido a
Cádiz
a
disfrazarse
allí,
pero
yo no
porque
no ha
habido
un
grupo
cercano
que lo
hiciese.
Además
de que
no va
con mi
carácter.
Para
hacerlo
tiene
que
vivirse
en tu
barrio,
en tu
zona,
con
los
vecinos,
porque
es una
fiesta
colectiva.
Tú no
puedes
irte
sola a
disfrazarte
por la
calle.
La
colectividad
es
otro
de los
rasgos
comunes
de
esta
fiesta.
Nos
desprendemos
del
'yo
real'
para
hacer
cosas
diferentes.
¿Por
qué
cree
que
hay
tantas
diferencias
entre
los
distintos
carnavales
de
Andalucía?
Cada
ciudad
vive
las
fiestas
a su
modo.
Cádiz
es la
que
tiene
más
tradición
y eso
se
nota.
Tengo
entendido
que en
la
época
de
Franco
la
gente
se
reunía
a
cantar
en la
intimidad
e
incluso
se
recuperaron
unas
fiestas
anteriores
para
festejar
esas
fechas.
Yo
creo
que
influye
además
el
casco
urbano.
En
Cádiz
es
mucho
más
recogido
y
todos
se
reúnen
en
torno
a unas
pocas
calles.
Aquí
la
fisonomía
de
ciudad,
con
todo
el
litoral
a lo
largo,
no
invita
a que
la
gente
se
reúna.
¿El
carnaval
era
más de
masas
en la
antigüedad?
Pues
sí
porque
participaba
toda
la
ciudad.
Era la
celebración
más
importantes
del
calendario
en
Atenas,
la
fiesta
de la
Antesteria.
Los
griegos
se
tomaban
el
vino
nuevo
y una
de las
cosas
más
interesantes
era el
asunto
de la
comida.
Para
nosotros
Cuaresma
significa
ayuno
y el
carnaval
es el
atracón
previo
a esa
época.
Eso
responde
a un
ciclo
agrícola.
El
campesino
sembraba
y
después
descansaba
porque
ya
sólo
tenía
que
recoger
los
frutos.
En la
fiesta
de la
Antesteria
se
hacía
una
especie
de
concurso
para
ver
quién
bebía
más.
