Iba a titular este artículo en latín, haciendo una broma con el "vae victis" que, según La guerra de las Galias , los romanos susurraran a los rendidos galos de Vercingetórix, pero luego me he acordado de que la ministra de Cultura tiene problemas con el latín, ya que confunde el "dixit" (término equivalente a "dijo", con el que se citan las palabras de alguien en un contexto culto), con los dibujos animados de Pixie y Dixie . Ya sé que esto pasó hace dos semanas, pero es que la última estuve malo, disculpen. Son curiosos los problemas que tienen los ministros nacidos en Cabra con el latín. Solís, un desdichado antecedente de la ministra en Madrid, ya intentó destrozar las humanidades, apelando a la nula necesidad del latín para la educación. Muy tranquila y agudamente le respondió desde Galicia Torrente Ballester, recordándole al ministro de Cabra que gracias al latín podía ser llamado egabrense. Esto se hubiera arreglado nombrando ministro de Cultura a José Calvo Poyato, político y novelista egabrense y hermano de la actual titular, que escribe bastante bien, sabe de lo que habla y no tiene problemas con el latín de andar por casa.

Las humanidades andan de capa caída. Amén de la persecución que sufren los escritores por los regímenes de izquierda radical (y no hay que buscar en América; ya verán la semana que viene, la que se avecina), parece que los nuevos planes de estudio universitarios optan por el sacrificio de algunas titulaciones, como Historia del Arte, basándose en la experiencia de otros países de Europa. Es un argumento que me hace gracia cuando lo oigo: para los sueldos, los contratos y el salario mínimo no oigo a nadie decir que haya que ajustarse a la media europea, con la falta que nos haría. Pero la cuestión es que siempre la paga la más inútil, la menos rentable, y parece que el patito feo es ahora Historia del Arte, que será una pequeña especialización dentro de ese mar inabarcable que es la Historia. Mi madre es historiadora del Arte y por su experiencia sé que incluso en el plan actual hay materias que se quedan fuera. ¿De qué Arte entenderán quienes apenas le dediquen dos años de especialización? Pues de muy poco. Pero eso no importa, no se engañen. Ay de las humanidades. La guerra de las Parias.